7) Broncos vs Jets
El segundo partido en Londres de la temporada tuvo de todo: safeties, touchdowns, jugadas de equipos especiales, pero sobre todo tuvo muchos muchos sacks. Solamente por parte de los Broncos capturaron nueve veces a Justin Fields.
Hubo un par de jugadas eléctricas, pero la mayoría de ocasiones fueron ambas defensivas las que se impusieron, al grado que, en la segunda mitad del partido, solamente se marcaron ocho puntos, ningún touchdown. Una clínica defensiva por parte de Jonathon Cooper y compañía, en la que ni Bo Nix ni Justin Fields encontraron respuestas.
6) Jaguars vs Rams
Viéndolo en retrospectiva, puede que este haya sido el partido que catapultó a Matthew Stafford a su campaña por el MVP, misma que hoy día parece liderar.
La batalla de las yardas la ganó Trevor Lawrence (296-182), igualmente la de los pases completos (23-21), pero la de touchdowns fue una cosa abrumadora. Stafford lanzó cinco pases de touchdown dejando para el recuerdo una de las actuaciones individuales más dominantes en la historia de los International Games de la NFL. Nadie había logrado esta proeza fuera de suelo estadounidense. Otro factor que le añade virtud a lo conseguido por Stanford es que fue el partido que se perdió Puka Nacua por lesión y habían ciertas dudas sobre que tan bien resultaría la dupla Davante Adams - Matthew Stafford como conexión principal. La pareja se combinó para tres anotaciones y un partido en el que Rams dejó claro que su papel en la temporada regular sería de un claro contendiente.
5) Vikings vs Browns
El único juego en el que el estelar corredor novato de los Browns, Quinshon Judkins, ha superado la barrera de las 100 yardas terrestres este año fue en Londres, donde su gran actuación no fue suficiente para que los Browns se llevaran la victoria.
La forma en que inició el partido, un pase de touchdown de Cam Akers por parte de Vikings, ya decía todo del tipo de partido que habría en UK. Saleroso, cerrado, competido por las defensivas de alto nivel pero con flashazos de las ofensivas. Justin Jefferson, Jordan Addison, David Njoku, el mencionado Judkins. Por supuesto Myles Garrett hizo de las suyas en el viejo continente, también. Todo se entremezcló para que el desenlace fuera de película. Serie de casi tres minutos por parte de Minnesota que recorrió 80 yardas en 10 jugadas para terminar con un touchdown que les dio la ventaja 21-17. Todavía con 25 segundos en el reloj, Dillon Gabriel intentó un último esfuerzo para Cleveland pero el tiempo se les terminó. Partido entretenido, con chispazos y un cierre dramático

4) Commanders vs Dolphins
No fue el juego más "limpio" en sentido de ejecución por parte de ambos equipos. Pero el desenlace del primer partido NFL en la historia del Santiago Bernabéu no pudo tener más drama.
Fue demasiado nostálgico ver esta versión de Marcus Mariota que podía mover el balón con sus compañeros y, sobre todo, el acarreo largo que puso de pie a la afición que está acostumbrada a ver escapadas a toda velocidad de Kylian Mbappé o Vinicius. Se puede comprender que el desarrollo del juego en los primeros tres cuartos no fue el más eficiente, pero hablando de nivel de emotividad, el cierre del partido no pudo ser mejor. Ambos equipos con series largas, llegando a la yarda 2 para ganar el partido, ambos se la jugaron en cuartas oportunidades, y en ambas ocasiones las defensivas se impusieron. Tuvimos NFL extra, pifió Mariota y los Dolphins lograron ser efectivos. ¿Ejecución? No la mejor. ¿Emoción final y definición? Más que cumplido.

3) Vikings vs Steelers
Considerando lo parchada que llegó la línea ofensiva de los Vikings a este partido, no creo que pudimos haber pedido una mejor actuación de Carson Wentz y compañía. Wentz lanzó para más de 350 yardas, pero fue interceptado dos veces. Kenneth Gainwell el primer touchdown de la NFL en tierras irlandesas y repitió la dosis toda vez que Jaylen Warren no estuvo disponible. Tuvimos jugadas circenses de Justin Jefferson quien terminó con más de 100 yardas, y también tuvimos una exhibición atlética por parte de DK Metcalf con una escapada brutal después de recorrer 80 yardas entre pase y post recepción.
Los primeros dos cuartos fueron muy competidos, todo muy parejo hasta que en el tercero un touchdown separó las distancias a favor de Steelers. Pittsburgh volvió a pegar a inicios del último cuarto, pero los 14 puntos sin respuesta de Vikings en los últimos 8 minutos de juego nos dieron una última posesión de Vikings buscando el milagro que finalmente no sucedió, pero emoción hubo en todos niveles.

2) Falcons vs Colts
El juego de Jonathan Taylor. Fácilmente podríamos titularlo así y no creo que habría oposición, pero no cuenta la historia completa. Y es que si alguien cuenta que un corredor elite tuvo tres anotaciones, 32 acarreos y 244 yardas, sería muy válido y lógico asumir que el equipo que cuenta con él dominó y ganó el partido a placer pero no fue así.
Tuvimos cuatro cambios de ventaja en el marcador incluyendo la posesión de la victoria. Hay muchísimo mérito en los últimos tres drives con puntos al final del cuarto cuarto. La escapada de 83 yardas por parte de Taylor dio muchísimo oxígeno a Colts. Pero Falcons respondió con una ofensiva de niveles adultos: 71 yardas en cuatro minutos para tomar ventaja. Parecía que podrían ganarlo pero Colts empató a 25 segundos del final y luego lo cerró en tiempo extra con una anotación más del gigante JT. Este partido también tuvo drama, pero fue mucho más eficiente y dinámico en su ejecución para deleite de la afición de Berlín.

1) Chiefs vs Chargers
Qué lejos están las versiones de estos equipos en la actualidad. Pero qué gozada vivió la afición brasileña. Un Justin Herbert en todo su potencial, un Quentin Johnston desatado, un Patrick Mahomes mágico, jugando al estilo jogo bonito con una tercia de jugadas que dejaron boquiabiertos a la afición carioca.
Casi 600 yardas aéreas sumaron entre Mahomes y Herbert, Mahomes se lució corriendo, Herbert lanzando. Apoyo de ambos lados, polémica, peleas que no se celebran pero que dan una ilustración de la intensidad con la que se vivió el partido. Aparición de dos históricos que han dominado la última década en la liga como Travis Kelce y Keenan Allen. Tensión, emoción, brillante ejecución. Defensivas que aparecieron en momentos clave y un desenlace emocionante en los últimos dos minutos que terminó con la sensación de que Justin Herbert y los Chargers darían mucha pelea este año como ha sido. Hubo de todo, de principio a fin. Por segundo año consecutivo, Brasil vibró con un partidazo de la NFL.






